Un paréntesis para un poco de autobómbing. La última oleada de EGM da a El Progreso una de las mejores audiencias de la historia, 101.000 lectores. En los tiempos que corren es lo mejor que nos puede pasar, que los lectores nos sigan siendo fieles, aquí en "nuestra huerta". Hablando con compañeros del periodismo capitalino, donde la crisis está causando importantes bajas, solemos usar siempre este simil. En Madrid no hay huerta y si se desabastecen los supermercados, ¿dónde vamos a encontrar de comer? Aquí, en el "pueblo", siempre hay un trocito de terruño para plantar lechugas. Pues en el periodismo, igual.
¿Por qué digo 17 millones? Porque en una población de 300.000 habitantes (provincia de Lugo) que nos lean 101.000 es como si El País tuviera una audiencia de 17 millones (y apenas llega a tres). Por tanto, esta vez toca brindar.
¿Qué tiene que ver esto con el diseño? Nosotros queremos pensar que algo sí tiene que ver, entendiendo la estética como parte irrenunciable de la información, de la buena información.
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